¿Por qué medir los niveles de DHA
en la leche materna?
El DHA omega-3 es un componente importante del cerebro en desarrollo del bebé y está presente en la leche materna. Los niveles de DHA en la leche materna, al igual que en la sangre, suben y bajan principalmente según cuánto consumas en tu dieta. Recomendamos niveles de DHA en la leche materna de al menos 0,32% para satisfacer las necesidades del cerebro en crecimiento del lactante.
¿Cuándo deberías medir los niveles de DHA en la leche materna?
2–4 semanas después del parto
Los niveles de DHA cambian de forma natural en la leche materna, especialmente en los primeros días tras el parto (llamados “calostro”) y en las etapas posteriores (“leche madura”). Nuestro objetivo es medir la proporción de DHA en la leche madura.
Primera toma del día
Como saben muchas madres, el término “día” puede usarse de forma flexible. Intenta recolectar la muestra durante la “primera” toma del día, antes del desayuno o de tomar un suplemento. Lo mismo aplica si extraes la leche con bomba.
En cualquier momento durante la toma
Como medimos un porcentaje de grasa y no la cantidad total, el nivel de DHA en la leche materna no se ve afectado por los cambios en el contenido de grasa entre la leche inicial (más acuosa) y la leche final (más cremosa).
Optimiza tus niveles de DHA en 3 pasos sencillos
Medir
No sabrás si tus niveles de DHA en la leche materna son óptimos solo por comer pescado o tomar suplementos — deben ser medidos.
Modificar
Una vez que conozcas tu nivel de DHA en la leche materna, puedes optimizarlo con simples cambios en la dieta.
Monitorear
Analizar tu nivel de DHA en la leche materna cada 2–4 semanas asegurará que se mantenga en un rango óptimo.








